Bajo el pretexto de escribir las memorias de Alice B. Toklas; su iacute;ntima amiga; secretaria y confidente; Gertrude Stein; no solo nos cuenta la historia de su propia vida sino que nos ofrece la deliciosa croacute;nica de treinta antilde;os de vida parisiense. laquo;Hoy en diacute;a la gente tiene tanta informacioacute;n a mano que corre el riesgo de perder el sentido comuacute;n.raquo;Gertrude Stein Se sabe que Gertrude Stein era una mujer atrevida en sus opiniones y con un sentido del humor peculiar; pues bien; el tiacute;tulo mismo de este libro demuestra su talento y la voluntad de ir maacute;s allaacute; de lo establecido en cuanto a geacute;neros literarios: aparentemente estamos leyendo un texto autobiograacute;fico y quien lo firma es Alice B. Toklas; la secretaria y compantilde;era sentimental de la gran autora; pero quien estaacute; detraacute;s de estas paacute;ginas es la misma Gertrude Stein. Asiacute;; al hilo de la voz de Alice; entramos en la casa que las dos mujeres compartieron en Pariacute;s entre1903 y 1933; y por donde desfilaban las figuras que definieron lo que seriacute;a la cultura de principios del siglo XX. Comiendo con Picasso; cenando con Hemingway o hablando de sombreros con Marcelle Braque; se fue hilando una tradicioacute;n intelectual que hoy ya es claacute;sica y a Gertrude Stein debemos el gran favor de haber abierto las puertas de este saloacute;n donde las aneacute;cdotas; divertidas o traacute;gicas; acabaron convirtieacute;ndose en Historia con mayuacute;sculas.
2014-05-10 2014-05-10File Name: B01LY2VGGE
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